Breve historia del mosaico

Mesopotamia
       Las primeras noticias que tenemos sobre esta técnica de representación artística las situamos en la civilización mesopotámica, concretamente en la frenética actividad arquitectónica de los sumerios como recubrimiento de las paredes de los templos y palacios.

       La cultura del Obeid, 5000 aC:  El templo más antiguo se sitúa en Eridú con diecisiete niveles superpuestos.  Consta de un pequeño recinto cuadrado cuyos muros están reforzados por un contrafuerte interior, similar a las viviendas y a su espacio interno. En las remodelaciones siguientes hay una preocupación por el aspecto externo: los contrafuertes se sacan al exterior y se busca la distribución de las superficies, formando nichos mediante la intersección de contrafuertes ya frecuentemente ornamentales.

      En torno a 3750 aC comienza un proceso de transformación  en Caldea que revoluciona la sociedad y la organiza mediante el empleo de obras hidráulicas de ingeniería. La ciudad-estado de Uruk tenía dos complejos de culto: Eanna y Kullab.  El conjunto de Eanna destaca por el Templo de Caliza pero hay unos edificios anteriores como el Templo de los conos de piedra 100 metros al oeste con una fachada posiblemente recubierta con murales geométricos y figurativos.

        El Templo de Caliza, ya de época posterior, abandona el adobe para edificar en piedra partiendo de un singular basamento. Tiene una cabecera que se abre al Patio de los Conos  de mosaico al que da a un pórtico de ocho columnas de más de dos metros y medio de diámetro, dispuestas en dos hileras. Todas las paredes externas se recubren por un colorido mosaico de piezas cónicas incrustadas en los adobes para embellecerlo.

 

         La mitología mesopotámica nos muestra en la Epopeya del Gilgamesh esta tradición en la que confluyen la construcción y la artesanía como principios fundamentales de su cultura. En una tablilla  cuneiforme podemos leer:

Acércate a Eanna, la morada de Istar (Inanna), que ni un rey futuro, ni un hombre, puede igualar.  Levántate y anda por los muros de Uruk, inspecciona la terraza de la base, examina sus ladrillos. ¿No es obra de ladrillo quemado? ¿No echaron sus cimientos los Siete (Sabios)?

Los siete sabios, Apkallu, son los sacerdotes de Enki, seres descendientes de los humanos a quien el dios Ea procuró gran conocimiento. Son criaturas que se presentan como los asesores de los primeros gobernantes de Caldea antes del Diluvio y que emergieron de los ríos (agua dulce Apsu) en forma de hombres-carpa para asegurar el buen funcionamiento de los planes del Cielo y de la Tierra. Concedieron a la humanidad los dones de la artesanía y las artes.

Oannes, el hombre pez, uno de los siete sabios  o Ummani "artesanos, instruidos"que enseñaron las artes y ciencias a los hombres.